lunes, 21 de julio de 2014

19 razones para no leer una columna de opinión

El título es una mentira. Ni voy a dar 19 razones ni les voy a decir que no lean una columna de opinión. El nombre del artículo lo puse de gancho para que entraran, porque eso es lo que está mandando la parada en internet.

Nos gustan las listas, siempre lo supimos; lo que nunca sospechamos es que estos se fueran a tomar las redes y que un método tan sencillo fuera a tener buenos resultados. Hoy los medios digitales están llenos de listados para todo, y ahora son con números no redondos. Entre mas raros (63, 11, 23), más rápido entra la gente porque ya no la sorprenden los listados con 5, 10 ó 20 numerales.

Le pregunté por el fenómeno a un amigo que trabaja en una página de internet y me dijo que lo hacían por los clicks, las páginas vistas y los visitantes únicos, que son las estadísticas que mandan la parada a la hora de vender pauta publicitaria, que es lo que permite que los medios digitales sobrevivan.

Pues a esto hemos llegado por la plata, a hacer listados a la loca. Yo los veía todos hasta que descubrí la trampa. Al primero que entré se llamaba ’10 razones por las que en 2013 dejarás tu trabajo’. Se me hizo novedosísimo y además me venía como anillo al dedo porque estaba cansado de ser empleado. Luego vinieron en fila recuentos tipo ’11 motivos para dormir con tu bebé’, ’22 lugares que no vas a creer que realmente existen’, ’29 sentimientos que son mejores que el sexo’ y ‘Las 31 piscinas más exóticas del mundo’.Todos, rankings con poco o ningún tipo de interés.

Pero el peor es uno que dizque fue “furor en las redes sociales” (ahora, hasta un moco pegado en la pared causa furor en redes sociales) que se llamaba ‘Razones por las que enamorarse de una mujer periodista es maravilloso’. Kilos de mierda, uno encima de otro, tenía ese artículo.

Para empezar, las periodistas no son maravillosas, son una jartera. Las que son hembras son también unas tapias, ex reinas que pasan de los desfiles a presentar farándula o a hacer relaciones públicas. También están las que se meten a publicidad, gremio al que no le cabe un idiota más. Por último están las periodistas que escriben, que además de feas son unas mamertas que se creen la verga porque saben juntar tres palabras. Eso, y encima son superinteligentes, supercríticas y no pierden una discusión porque todo lo analizan y todo lo saben.

Pero volviendo a los medios, también han cogido la maña de presentar las noticias incompletas para que uno entre a verlas. Ejemplos: ‘María Luisa Piraquive, la polémica pastora del MIRA, protagoniza un nuevo escándalo. Aquí los detalles’; o ‘Uno de los técnicos de los equipos bogotanos renunció hoy a su cargo. Conoce de quien se trata’.

También se pasan de abusivos al titular piezas tipo ‘20 chistes que solo los intelectuales entienden’ para que la mitad mire a ver si los entiende, o ‘35 cortes de pelo chistosos’; luego subtitulan "El 17 esta de no creer" para que uno entre y busque ansioso el 17, solo para descubrir que es una huevonada.

Cada vez que veo una noticia así, me muero de curiosidad por saber cuál fue el técnico que renunció, descubrir qué tan intelectual soy, o ver el peinado 17. Pero no cedo. No les voy a regalar mi click, por manipuladores.

En el caso de esta columna, muchos van a entrar a leerla por el nombre y la van a abandonar al primer párrafo porque no cumple con lo prometido en el título. Luego se irán en busca de 14 razones para casarse después de los 30 años, o de las 36 formas de hacer sonreír a una mujer. Para entonces será muy tarde porque ya me habrán dado su click, que era lo que necesitaba. Cayeron, zoquetes.

Publicada en la edición de junio de la revista Enter. www.enter.co