Los que pasan diciembre en Cartagena.
Los que oyen Shakira, Juanes y se ríen con La pelota de letras.
La gente de derecha.
La de centro.
Y la de izquierda.
Los que defienden al Bolillo.
Los que lo atacan.
La gente que adopta alguna posición.
Los que creen que la chiva periodística es una acierto y no un cáncer.
Los que creen que la chiva periodística es una acierto y no un cáncer.
Los que toman gaseosa al clima.
Los Papas (y los papás).
Los que creen en algún tipo de dios.
Los que rezan.
Los que leen.
Los que aman.
Las presentadoras de farándula.
Los narradores de fútbol.
Los columnistas, los blogueros, los tuiteros.
Facebook.
Los feministas.
Los machistas.
Los racistas.
Los nacionalistas.
Los regionalistas.
Los heterosexuales que no entienden que hay otro camino.
Los que no saben tocar piano.
Los concejales.
Los que han visto al menos una película de Harry Potter.
Los televidentes.
Los Papas (y los papás).
Los que creen en algún tipo de dios.
Los que rezan.
Los que leen.
Los que aman.
Las presentadoras de farándula.
Los narradores de fútbol.
Los columnistas, los blogueros, los tuiteros.
Facebook.
Los feministas.
Los machistas.
Los racistas.
Los nacionalistas.
Los regionalistas.
Los heterosexuales que no entienden que hay otro camino.
Los que no saben tocar piano.
Los concejales.
Los que han visto al menos una película de Harry Potter.
Los televidentes.
La gente de la Nasa.
Los que hacen lo que sea por dinero.
Los actores.
Los calvos.
Los peludos.
Los artistas conceptuales.
Los teatreros.
Los que hacen una cosa que se llama Mapping.
Los que no aceptan la legalización de la droga.
Los que no aceptan que el ser humano no sabe nada de nada.
Los que no tienen vicios.
Los que no ven porno.
Los abogados.
Los publicistas.
Los periodistas.
Los inversionistas.
Los contratistas.
Los petroleros.
Los militares, en especial los militares.
Los bilingües a medias.
Los hinchas no catalanes del Barcelona.
Los del Real Madrid que no nacieron en Madrid.
Los músicos que hacen nuevas versiones de canciones ajenas.
Los descendientes de Charles Darwin.
Los tartamudos, en particular, y los humanos, en general.
Los que hacen lo que sea por dinero.
Los actores.
Los calvos.
Los peludos.
Los artistas conceptuales.
Los teatreros.
Los que hacen una cosa que se llama Mapping.
Los que no aceptan la legalización de la droga.
Los que no aceptan que el ser humano no sabe nada de nada.
Los que no tienen vicios.
Los que no ven porno.
Los abogados.
Los publicistas.
Los periodistas.
Los inversionistas.
Los contratistas.
Los petroleros.
Los militares, en especial los militares.
Los bilingües a medias.
Los hinchas no catalanes del Barcelona.
Los del Real Madrid que no nacieron en Madrid.
Los músicos que hacen nuevas versiones de canciones ajenas.
Los descendientes de Charles Darwin.
Los tartamudos, en particular, y los humanos, en general.
Todos estamos un nivel por debajo en la escala evolutiva.